Transcurre el gobierno de Humala
en medio del beneplácito de la clase capitalista por su política
pro-imperialista y neoliberal. No pudiendo ser de otra manera dada la
naturaleza burguesa del Partido Nacionalista, que gobierna apoyado en bloque
por todas las fuerzas antipopulares del Parlamento. Ese Partido Nacionalista
que la dirección burocrática de la CGTP y del movimiento de masas llamó a
apoyar el 2011 como si representara a los sectores populares; la misma dirigencia
que meses antes se había comprometido con Fuerza Social para la Alcaldía de
Lima, con los mismos falaces argumentos.
Ya en aquella ocasión advertimos
que Fuerza Social no era un movimiento perteneciente al campo de los explotados
sino de la burguesía, y que Susana Villarán venía de ejercer muy altos cargos
en anteriores gobiernos reaccionarios. Estos dos años han probado nuestra
caracterización: el suyo es un gobierno municipal favorable a las corporaciones
y las multinacionales pero no a las mayorías, una política elitista y
prepotente similar a la ejecutada en su momento por Somos Perú y Alberto
Andrade. Esa es la razón de fondo por la que inmensas capas empobrecidas no
sienten ninguna simpatía por la actual administración de la capital.
Por supuesto, a nadie se le
escapa que el proyecto revocador es una avanzada de las fracciones políticas
más extremas y corruptas de la clase dominante. El castañedismo, el fujimorismo
y el aprismo están en campaña. Pero el toledismo, el pepecismo, el
acciopopulismo y el andradismo no son sino otras conocidas versiones de los
poderosos, acompañados por el ollantismo y monitoreados por… la Confiep. Los
trabajadores de Lima y del país no tenemos nada que ganar para nuestra
conciencia, organización y fuerza, sosteniendo a cualquiera de estas cofradías
de la clase enemiga, hoy dedicadas al salvataje de su similar Fuerza Social.
Sin embargo, los tradicionales
partidos de origen proletario, como el PC y Patria Roja, están dedicados a
servirlos. Participan en sus listas, les proporcionan activistas, apoyan sus programas
y objetivos, los justifican, se hacen sus cómplices y sus cúpulas viven de los
réditos económicos que ello proporciona. Toda su existencia está marcada por
esta sumisión. Así crean agrupaciones como Fuerza Ciudadana, donde obedecen a
Ciudadanos por el Cambio (del capitalista Lerner Guitis) y a Fuerza Social, así
buscan armar un “Frente Amplio” de contubernio con aparatos pequeño-burgueses
como Tierra y Libertad.
Los más combativos destacamentos
de las ciudades y el campo continuarán movilizándose por sus reivindicaciones,
aunque permanezcan abandonados por los falsos socialistas que mantienen
dominada la CGTP. Las regiones y los pueblos redoblarán su carga contra el
gobierno burgués y los partidos que lo apoyan. En esas luchas, los
revolucionarios seguiremos planteando la creación de organismos de
autodeterminación y poder trabajador, para poder constituir una Asamblea Popular Nacional que
represente a todos los oprimidos contra todos los opresores. Por eso, como
siempre en defensa del más elemental principio clasista, el principio de la independencia política proletaria,
rechazamos la postración electorera y llamamos a anular el voto el día 17 en
Lima.
¡Ruptura de la CGTP con el Gobierno y con Fuerza Social!
¡No apoyar a ningún sector de la burguesía!
¡Voto nulo, voto clasista!
06. 03.13
Colectivo Revolución Permanente en el Perú
1 comentario:
Hola, a los que están interesados en la vida y obra del Leonardo Da Vinci del comunismo, Lev Davidovich Bronstein (León Trotsky), les recomiendo la lectura de la siguiente entrevista (realizada a un trotskólogo peruano):
http://divergencia-carlitox.blogspot.com/2013/03/leon-trotsky-y-la-historia-que-pudo-ser_12.html
Ojalá puedan dejar comentarios. Saludos.
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