enero 29, 2021

Otro proyecto de genocida


Sagasti, el responsable de tres asesinatos policiales de jóvenes obreros agroindustriales, no movió un dedo durante dos meses para prevenir la llamada “segunda ola” infecciosa presentida ya en noviembre y producida a finales de año. Ahora dicta una cuarentena desde el 1 de febrero en medio del nuevo desastre: otra vez cerca de 800 muertos diarios (cálculo a partir de las cifras del Sinadef) y los hospitales colapsados. Si Vizcarra tasó en nimios S/. 760 el derecho a recibir algo de la riqueza producida para paliar treinta días de confinamiento forzoso, Sagasti lo ha convertido en ridículos S/. 600, siempre para la población en peores condiciones únicamente, relegando al resto del pueblo trabajador. Esta ruindad pretende ocultar la gran urgencia de un bono trabajador universal de S/2300, que establezca esa cifra como el estimado más cabal de un sueldo mínimo en el país. Solo dos meses le ha tomado a Sagasti ocasionar los tres muertos que a Vizcarra le tomaron más de dos años y ya lo ha superado en la bajeza de sus bonos. A este paso Sagasti puede convertirse en un genocida mayor que Vizcarra y sus 100.000 víctimas.